Estefany de la Caridad Calderón Figueredo tiene solo 15 días de nacida y parece que ya ha vivido años entre salas de hospital y el arrullo de manos desconocidas. A su cuerpecito menudo lo atraviesa una cicatriz casi tan grande como ella misma y a ese mismo corte le debe la vida. Esta es la versión corta.
La historia completa reza en su historia clínica y se explica con el privilegio de haber salido ilesa de una intervención quirúrgica de tres horas, que corrigió una malformación congénita, casi siempre, incompatible con la vida…